domingo, 11 de noviembre de 2012

Raros e infelices

326. Los hay raros, porque ven vacía la luna llena. Los hay infelices, porque ven vieja la luna nueva.

327. Los hay raros, porque creen que la literatura buena tiene género. Los hay infelices, porque creen que la literatura buena tiene sexo.

328. Los hay raros, porque se plantean en broma volver a nacer. Los hay infelices, porque se plantean en serio volver a morir.

329. Los hay raros, porque de niños dijeron 'no quiero'. Los hay infelices, porque de mayores dijeron 'sí quiero'.

330. Los hay raros, porque son lo que son, unos raros. Los hay infelices, porque son lo que son, unos infelices.

FIN

PD.: Estoy hasta los cojones de los raros y de los infelices.

viernes, 9 de noviembre de 2012

Raros e infelices

321. Los hay raros, porque creen que las cosas acaban cuando empiezan. Los hay infelices, porque creen que las cosas empiezan cuando acaban.

322. Los hay raros, porque no saben si prefieren los días iguales o los distintos. Los hay infelices, porque saben que prefieren los días iguales a los distintos.

323. Los hay raros, porque sueñan realidades como pesadillas. Los hay infelices, porque sueñan pesadillas como realidades.

324. Los hay raros, porque sueñan sueños prestados. Los hay infelices, porque prestan sueños soñados.

325. Los hay raros, porque quieren fotografiar la música. Los hay infelices, porque quieren insonorizar la fotografía.

miércoles, 7 de noviembre de 2012

Raros e infelices

316. Los hay raros, porque les gustan los textos cantados. Los hay infelices, porque no les gustan los textos leídos.

317. Los hay raros, porque son artistas por obra. Los hay infelices, porque son artistas por omisión.

318. Los hay raros, porque saben que turbante viene de turbar. Los hay infelices, porque no saben que masturbarse no viene de turbarse.

319. Los hay raros, porque tienen pesadillas con los domingos. Los hay infelices, porque tienen fantasías con las domingas.

320. Los hay raros, porque creen que subir a una noria es como subir al cielo. Los hay infelices, porque creen que bajar de una noria es como bajar del infierno.

lunes, 5 de noviembre de 2012

Raros e infelices

311. Los hay raros, porque creen que su sambenito es su mejor tarjeta de visita. Los hay infelices, porque creen que su sambenito es su peor desprestigio.

312. Los hay raros, porque disfrutan con la anormalidad de la vida cotidiana. Los hay infelices, porque disfrutan con la cotidianidad de los anormales.

313. Los hay raros, porque surgen de la melancolía y desembocan en la ironía. Los hay infelices, porque surgen de la ironía y desembocan en la tristeza.

314. Los hay raros, porque empiezan los cuentos por el final. Los hay infelices, porque no empiezan las cuentas por el principio.

315. Los hay raros, porque pronuncian igual el plural que el singular. Los hay infelices, porque pronuncian igual el sexo que el seso.

sábado, 3 de noviembre de 2012

Raros e infelices

306. Los hay raros, porque se desnudan sin quitarse la ropa. Los hay infelices, porque se visten sin ponerse la ropa.

307. Los hay raros, porque se ríen cuando vale la pena. Los hay infelices, porque lloran cuando no vale la pena.

308. Los hay raros, porque dejan de rezar cuando pierden la fe. Los hay infelices, porque siguen rezando cuando pierden la fe.

309. Los hay raros, porque han aprendido a distinguir los silencios de los secretos.  Los hay infelices, porque no han aprendido a distinguir los ruidos de los sonidos.

310. Los hay raros, porque se les ocurren buenas ideas, pero luego las olvidan. Los hay infelices, porque se les ocurren malas ideas, pero luego las recuerdan.

jueves, 1 de noviembre de 2012

Raros e infelices

301. Los hay raros, porque son afortunados y no se dan cuenta de ello. Los hay infelices, porque son desafortunados y se dan cuenta de ello.

302. Los hay raros, porque vinieron al mundo como tú y como yo. Los hay infelices, porque se fueron del mundo como tú y como yo.

303. Los hay raros, porque cuando se fueron ya nada fue lo mismo. Los hay infelices, porque cuando llegaron todo siguió siendo igual.

304. Los hay raros, porque olvidan pagar lo que compran. Los hay infelices, porque no recuerdan cobrar lo que venden.

305. Los hay raros, porque buscan entre sus recuerdos. Los hay infelices, porque huyen de sus recuerdos.