domingo, 29 de noviembre de 2009

Nadie podrá con nosotros

Después de este título para el post me he puesto el listón muy alto y si sigo adelante lo único que puedo hacer es estropearlo. Encima me encuentro a medio gas después de haber hecho doblete invernal. Bueno, me la voy a jugar.

La del sábado noche no fue una fiesta cualquiera. Fue una de las buenas. Todos los días pueden ser grandes días, pero no todos los días se reúne a los más grandes. Te sueles dar cuenta de eso cuando te despiertas al día siguiente, que es hoy, y lo primero que recuerdas es la última copa del penúltimo bar.

Enseguida te acuerdas de aquel comentario sobre los restaurantes chinos, asiáticos para más señas. Y de las risas sobre las bajas incentivadas de algunos de los grandes. Y del Franvi y del Teka. Y de los flashes cruzados. Y de Pedrito e Iniesta. Y de los ingenieros de hoy que dirigen el mundo a pesar de los litros de ayer.

Y, sobre todo, de lo bien que estabas cuando estabas allí. Por eso voy a guardar algo de esta noche especial en el blog y me pegaré un voltio por aquí cuando necesite un rato de respiración asistida. Te aconsejo hagas lo mismo.

Un abrazo a tos y hasta la próxima.




























2 comentarios:

Peter Mihm dijo...

Enorme Sepe, cumpliendo 11 años de una tacada y saltándose los 40. Con un par.

Un abrazo a todos los premiados.

LITROS dijo...

Me admira cada día mas vuestro aguante.
Yo llegaba "cuasi" derrotado por mi liada familiar del día y ahi estabais todos como pinceles después de la vuestra.
Y todo lo que me perdí de lo cual me informó Borin, punualmente, al día siguiente.
Un abrazo y nos vemos, seguro, en la proxima.